jueves, 6 de mayo de 2010

La cafetera italiana







Mientras espero que suba el café
Pienso en la cafetera, ahí, sobre la hornalla:
Hace unos años se la dimos
De regalo a mis padres, y es posible
Que dentro de unos años los sobrevivirá.
Plateada y negra, hecha en Ferrara,
Todos los días sabe de sus manos
Y un día ha de pasar a otras manos
Como llegó a las nuestras
En una compraventa.
Aquí está, servicial, práctica, hermosa,
Ayudando a vivir cada jornada,
Un objeto, no más, entre los otros
Objetos de la casa. Sólo habla
Ahora, cuando asciende el café a borbotones:
Apago el gas, en cada taza
Vierto el líquido oscuro,
Luego también apago la luz de la cocina,
Y allí queda, en su paz, la cafetera
Enfriándose de a poco en la penumbra,
Mientras en las ventanas continúan
La noche, el viento, las constelaciones...


P. A.

[De Estudios de la luz / Poesía 2005-2007,
Pre-textos, Valencia, España, en prensa]

No hay comentarios:

Publicar un comentario